Regalices rojos

Adam guarda un tarro lleno de regalices rojos (los preferidos de su hija) en el armario más alto de la cocina, porque sabe que es la única forma de que la pequeña Lola vaya al dentista. Y porque le encantan.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen truco.
¿Regalices huecos o rellenos?
Da igual, a Lola le encantan todos.

^^

Anónimo dijo...

Uy pobre Lola... los regalices son su kryptonita (¿se escribe así?) jaja

Lolita and her special winter confessions dijo...

Seguro Lola tiene alguna maniobra para llegar al armario más alto :)